
¿Qué es una radiofrecuencia pulsada?
La radiofrecuencia pulsada (RFP) es un tratamiento neuromodulador, y por tanto no destructivo, que se aplica sobre las raíces nerviosas, nervios periféricos y discos intervertebrales para tratar el dolor de raíces cervicales, torácicas y lumbares, de nervio periférico (meralgia parestésica, neuralgia occipital etc) y dolor de origen discal o discogénico lumbar o cervical.
Consiste en la aplicación de una corriente eléctrica de elevada frecuencia (400-500Hz) en forma de pulsos, 20 mseg de estimulación eléctrica y 480 mseg de reposo eléctrico, 2 veces por segundo, sin superar nunca los 42ºC, a través de una aguja especialmente preparada que se sitúa en los targets específicos bajo control radioscópico o ecográfico.
Indicaciones de la Radiofrecuencia Pulsada
- Dolor radicular lumbar, cervical o torácico que no responde otros tratamientos conservadores, sin déficit neurológico (radiculalgia, no radiculopatía clínica)
- Neuralgia suboccipital, de nervio pudendo, de nervio fémoro-cutáneo etc
- Dolor discogénico lumbar y cervical
¿Como se realiza la técnica de RF pulsada?
Se realiza en quirófano, de forma ambulatoria, bajo anestesia local o con una sedación ligera La posición quirúrgica depende del área a tratar, decúbito supino o lateral en el caso de la región cervical, o decúbito prono a nivel dorsal o lumbar.
Bajo control ecográfico o radioscópico se identifica la zona anatómica donde situar una aguja de radiofrecuencia en vecindad del nervio o raíz a tratar
- Para confirmar la correcta posición, se realiza una estimulación sensitiva para indicarnos cuánto de cerca estamos del nervio, siendo fundamental estar a la mínima distancia: cuanto más cercano, mayor eficacia y más prolongado el alivio del dolor.
- Confirmada radiológica y funcionalmente que estamos correctamente en contacto sobre el nervio o raíz a tratar, se inicia el tratamiento, manteniendo durante varios minutos los parámetros de estimulación:
- limitando la temperatura para no superar los 42ºC
- frecuencia 2Hz
- 20 milisegundos de estimulación y 480 de reposo para permitir la disipación de temperatura en los tejidos.
¿Como es el postoperatorio?
Tras un periodo corto de observación se puede proceder al alta, para mantener unas horas de reposo en domicilio.
Precisará analgésicos habituales durante unos días por la irritación provocada por la introducción de las agujas de radiofrecuencia, aunque es habitual reincorporarse a sus actividades habituales a día siguiente.
Sin embargo, a diferencia de otros tipos de radiofrecuencia, es muy probable que precise durante unas semanas mantener tratamiento analgésico de forma pautada por el incremento temporal del dolor neuropático.
¿Cúal es el resultado habitual?
Si la indicación y la técnica son correctas, se espera resolución o reducción del dolor, que habitualmente tarda unas 8 semanas en ser apreciable. De la misma forma que con otros tratamientos, la corrección de los gestos o actividades que provocan dolor y la estabilización muscular durante el periodo de eficacia del tratamiento es básica para evitar la reaparición del dolor.
Si ha sido eficaz, en caso de reaparición tardía puede realizarse de nuevo con garantías.


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