El uso prolongado de teléfonos móviles, ordenadores portátiles o tablets, obligando a mantener un gesto de flexión para su uso, es una fuente creciente de sufrimiento cervical. En otros casos, el antecedente de una accidente de tráfico con un latigazo cervical es una fuente potencial de color cervical tardío por la pérdida del adecuado control postura. Sin un adecuado plan de ejercicio para compensar la sobrecarga funcional, es inevitable que más tarde que pronto se pierda la estabilidad del cuello.
Los pacientes con frecuencia explican de forma inconsciente cúal es su problema. Expresiones como “me pesa la cabeza” o “necestaría quitarme la cabeza para poder descansar” son características y sugieren claramente el origen del dolor.
La región cervical tiene una curvatura fisiológica ( lordosis) que permite que la cabeza se mantenga en equilibrio sin esfuerzo, manteniendo la horizontalidad en la mirada.
Cuando aparece la rectificación cervical o incluso o la inversión de la curva (cifosis cervical), los grandes grupos musculares intentar mantener la posición de la cabeza, provocando contracturas musculares persistentes en elevadores de escápula, trapecios escalenos y esternocleidomastoideo, y como consecuencia, cefalea, nucalgia, dolor de oídos , tinnitus, bruxismo e incluso dolor en las articulaciones entre las costillas y el esternón.
Para corregir esta situación, es básico corregir hábitos posturales y mejorar las condiciones de trabajo, elevando por ejemplo la pantalla del ordenador. Estas medidas reducen el dolor pero no suelen ser suficiente. El tratamiento mediante infiltraciones con PRP (concentrado de factores de crecimiento plaquetar) en los ligamentos posteriores del cuello y en la musculatura cervical profunda potenciará la estabilidad músculoligamentosa y facilitará la recuperación postural. A continuación, un plan de ejercicio adecuado a su problema ayudará a mantenerte libre de síntomas.